Aldea Santa Avelina, San Juan Cutzal, Quiché.
El 30 de noviembre concluyó un trabajo exhaustivo de búsqueda, reconocimiento e inhumación de 172 osamentas de víctimas del Conflicto Armado Interno -CAI-, proceso impulsado por la Asociación de Población Desarraigada de Nebaj.
Fredy Noriega, vicepresidente de la asociación califica como «un éxito» dicho proceso porque permite que las familias cierren el ciclo del duelo que duró décadas. Sin embargo el proceso » sigue con los reclamos al Estado para demandar justicia para las víctimas» destaca Noriega.
Según Fredy Noriega el Programa Nacional de Resarcimiento -PNR- sigue sin dar cumplimiento a las medidas en favor de las familias establecidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos -CIDH-.
Algunas de las víctimas fueron reconocidas por Toma de Muestra de ADN, mientras otras debieron ser reconocidas por una Exposición de Ropa donde las familias reconocieron a sus víctimas por medio de la ropa que vestían la última vez que las vieron con vida.
En dicho proceso aún hay personas que no pudieron ser identificadas, quienes fueron enterradas en tumbas identificadas con códigos establecidos por la Fundación de Antropología Forense de Guatemala -FAFG- para que el futuro puedan ser identificadas por sus seres queridos. Procedimiento que contó con el apoyo del Comité Internacional de la Cruz Roja -CICR-.