Francisca, 13 años, agredida sexualmente por un vendedor, sus trillizos murieron a los 3 días.

Estefany, 13 años, agredida sexualmente por su padrastro, su bebe nació con sífilis congénita.

María, 13 años, agredida sexualmente por su padre de 65 años, la madre de 28 años padece discapacidad mental.

Juana, 13 años, agredida sexualmente por un vecino, sus gemelas murieron al nacer.

Historias como estas se repiten frecuentemente en nuestro país. Para el mes de julio, 2012 niñas de 10 a 14 años fueron violentadas y obligadas a culminar su embarazo, la cifra aumenta si se habla de menores de 19 años, 61, 600.

Mientras esto sucede, las estrategias para prevenir la violencia sexual, embarazos y recuperación del plan de vida para las niñas no dan resultado. Myrna Montenegro del Observatorio de Salud  Sexual y reproductiva, OSAR, denuncia que prácticamente las niñas quedan en abandono.

Teóricamente el estado aprobó planes para brindar educación integral en sexualidad y prevención de embarazos sin embargo no  cuentan con presupuesto para su implementación.

Según las cifras del Ministerio de Salud, se registra un incremento de 10 mil casos más  de  embarazos en niñas y adolescentes, siendo Huehuetenango, Alta Verapaz, Guatemala y San Marcos los departamentos con mayor incidencia.

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