79 niñas menores de 14 años fueron violentadas sexualmente en Huehuetenango y producto de ello, ahora son madres.
Myrna Montenegro, del Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva, OSAR, comenta que el abandono estatal y la pobreza dejan a las niñas en indefensión, víctimas de violencia sexual.
“Huehuetenango solo tiene una dirección del área de salud y los peores indicadores de pobreza y desnutrición. A las mujeres las ven como objetos que pertenecen al papa o al esposo” expresó Montenegro.
Sumado a ello, las niñas tienen poco acceso a la educación formal, debido a que son criadas para casarse y no para construir su propio plan de vida.
Y las pocas niñas que asisten a las escuelas, tampoco reciban educación que les permita tomar sus propias decisiones. La ley contempla que las y los niños reciban educación sexual en las escuelas, en la realidad, no se cumple.
A nivel nacional se ha registrado 578 casos de niñas menores de 14 años, de las cuales no se saben cuántas han denunciado violencia sexual, cuáles de ellas han regresado a las escuelas o cuantas reciben asesoría para continuar con su plan de vida.