Por: Rubén Darío Melgar – Petén.
A pesar que en la actualidad son evidentes los efectos negativos de los productos agroquímicos para el medio ambiente, pues ha traído mortandad de peces en ríos, daños a la madre naturaleza y en la agricultura, el gobierno de Guatemala se ha opuesto a la regulación de su uso.
El ingeniero Rolando Lemus representante de incidencia política en la Red por la Defensa de la Soberanía Alimentaria en Guatemala REDSAG, dijo que Guatemala es uno de los 120 países miembros del Convenio de Roterdam, que es un acuerdo que tiene que ver con la regulación del uso de algunos químicos altamente tóxicos para la agricultura en el mundo entero, y recientemente del 24 de abril al 5 de mayo de este año, Guatemala anunció que no está de acuerdo con esa regulación que cita el convenio.
Según el entrevistado, el convenio dice que los países productores de pesticidas tienen que pedir permiso a los pueblos o a los territorios para poder ser utilizado ese químico en la agricultura. “Como el gobierno lamentablemente no está de acuerdo, “significa que en este país se pueda usar libremente esos productos químicos”, dijo Lemus.
Los graves daños que ha traído el uso de los pesticidas no solo es en la agricultura, sino también en el ser humano, ya que por su excesivo y mal uso, actualmente ha habido pérdida de embarazos, malformaciones genéticas, cáncer, leucemia y afecciones respiratorias severas.
El experto de REDSAG indicó que hay que estar alerta de lo que hacen las autoridades tanto nacionales como internacionales a espaldas de los pueblos. “tenemos que estar informados sobre las decisiones que están tomando, también hay que compartir esa información a los campesinos, agricultores y estar alertas”, mencionó.
Entre los químicos altamente tóxicos están: el Paraquat (gramoxone), fenthion, triclorfon, Carbofuran y carbozulfan.
Hablamos con varios representantes de organizaciones de la sociedad para saber que piensan sobre la postura del estado de Guatemala en no querer regular el uso de los químicos.
Mynor Tujal de Patzun Chimaltenango, mencionó que el gobierno está aliado con las empresas que no quieren que se regule el uso de los químicos en la agricultura.
En tanto Irene Hernández, de Totonicapán, dio a conocer son algunos sectores interesados que están en contra de la regulación porque sus intereses son lucrativas.
Por último, Miguel Ángel de una organización de Peten, dijo que es lamentable el actuar del estado y afecta mucho a las actividades campesinas, por lo que es evidente que lo que buscan es monopolizar los cultivos.
Las organizaciones campesinas y la sociedad civil, exigen al Gobierno de Guatemala controlar la comercialización y uso de los agroquímicos.
