Se cumplen 23 años del asesinato de Monseñor Juan José Gerardi, su legado permanece en la memoria de cientos de personas y la lucha por un país justo sigue siendo el objetivo.
Monseñor Gerardi, fue un defensor de los derechos humanos, denunció las atrocidades cometidas por el ejército durante el Conflicto Armado Interno y lo evidenció en la publicación del informe “Guatemala Nunca Más”, Recuperación de la Memoria Histórica (Rehmi).
El vigésimo tercer aniversario se conmemora en medio de retrocesos democráticos y en una acción deliberada por cooptar la justicia, «un país que le quitó la vida a monseñor Gerardi, permitió que se le arrebatara la vida a miles de guatemaltecos y que sigue permitiéndolo a través de la débil actuación en materia de respeto de derechos humanos del actual gobierno», dijo Mayra Rodríguez, del Movimiento Gerardi.
La violencia, criminalización y persecución en contra de quienes defienden la vida, el territorio y los derechos humanos continúa, «son los mismos los que siguen generando persecución, siguen generando actitudes que buscan eliminar a todo aquello que les signifique a ellos una evidencia de la realidad social, la cooptación social del Estado, lamentablemente las cosas no han cambiado», expresó Neri Rodenas, de la Oficina De Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (ODHAG).
Agrego que, es importante desde la iglesia, organizaciones sociales, ciudadanos y ciudadanas promover y dar a conocer el legado y lucha de monseñor Gerardi, porque nos permite luchar con memoria.
Tras una semana de actividades en memoria de Monseñor, se realiza una misa en la catedral metropolitana. Otro acto relevante fue la beatificación de 10 mártires en Quiché, entre estos, tres sacerdotes españoles y siete laicos, entre los que se encuentra un niño de 12 años.