Guatemala ocupa el puesto 152 de 175 en cuanto al desarrollo integral de los niños y niñas. La pobreza, la desnutrición y distintas formas de violencia, marcan la vida de la niñez del país.
A 30 años de promulgada la Convención sobre los Derechos del Niño Guatemala “avanza más en el discurso que en la acción” expresó Otto Rivera, integrante de la Coordinadora Institucional de promoción por los Derechos de la Niñez, CIPRODENI.
Al ratificar la convención, el país modificó su marco legal y aprobó la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia y una serie de legislaciones que protege a los niños y niñas de distintos abusos, pero la realidad refleja una situación diferente.
“El primer derecho que sigue violándose es el derecho a la vida, integridad, salud, seguridad alimentaria, educación, a la protección integral. El estado de Guatemala sigue teniendo una enorme deuda” expresó Rivera.
La situación se agrava cuando se analiza la realidad de niñas y adolescentes indígenas, pues el estado disminuye a Q.5 su inversión a pesar de que son ellas quienes tienen menos acceso a educación o salud y quienes son más afectadas por la violencia sexual.
Recientemente el presidente electo Alejandro Giammattei, se comprometió públicamente a mejorar la inversión en la niñez, por lo que colectivos le solicitan trabajar en conjunto para mejorar la calidad de gasto en la niñez.