Este 24 de octubre fue detenido el militar retirado César Octavio Noguera Argueta, hecho que permite el inicio formal del proceso por genocidio y desapariciones forzadas cometido en tiempos de Romeo Lucas García.
La denuncia penal fue interpuesta en el año 2000 por más de un centenar de familiares y sobrevivientes del Conflicto Armado Interno que vivieron las políticas de represión entre el 01 de julio de 1978 al 23 de marzo de 1982.
Antonio Caba, sobreviviente e integrante de la Asociación Justicia y Reconciliación relata que por lo menos 1, 421 personas fueron víctimas de los delitos cometidos en los municipios de Santa María Nebaj, San Gaspar Chajul y San Juan Cotzal.
“Se registraron 31 masacres donde murieron 1, 128 personas, 23 aldeas arrasadas, 97 muertes selectivas, 117 muertes por desplazamiento forzado, 26 casos de violencia sexual y 53 casos de desaparición forzada” puntualizó.
Junto a Noguera Argueta quien fungía como jefe de operaciones, están acusados el ex feje del Estado Mayor Manuel Benedicto Lucas García y el jefe de inteligencia Manuel Antonio Callejas y Callejas.
Los dos últimos fueron condenados en 2018 por la desaparición forzada de Marco Antonio Molina Theissen, en un proceso que se vio marcado por ataques e intimidaciones para la familia. Caba expresa que por este caso también han sufrido amenazas.
La audiencia de primera declaración podría realizarse el próximo lunes 28 y será el Juzgado de Mayor Riesgo “B” quien conozca el caso, para los familiares este representa “un momento de dignificar a los seres queridos que fueron masacrados”.