Por: Estefania Valenzuela
Gracias a los testimonios de los hombres y mujeres víctimas sobrevivientes, mañana se podría comprobar nuevamente que en Guatemala si hubo genocidio y violencia sexual y que las víctimas fueron integrantes del grupo étnico maya ixil.
En 2013 ya se había logrado una sentencia condenatoria en contra del dictador José Efraín Ríos Montt por este delito, sin embargo la justicia no culpo a José Mauricio Rodríguez Sánchez jefe de inteligencia militar.
Tras la resolución de la corte de constitucionalidad de retrotraer el proceso ahora los sobrevivientes tienen una nueva oportunidad para demostrar su implicación. El abogado Francisco Vivar explica que tras los testimonios pruebas y peritajes se demostró como la inteligencia militar analizo los ataques en contra de la población.
El general Rodríguez Sánchez considero que este grupo étnico era el enemigo interno y declaró zona roja provocando masacres y que las comunidades se desplazaran a la montaña siendo sometidas a condiciones inhumanas.
30 años después los sobrevivientes podrían obtener justicia aunque este proceso les ha revictimizado según Juan Francisco Soto director del centro de acción legal en derechos humanos CALDH.
Sobrevivientes Confían que la justicia de Guatemala cumplirá con su función de garantizar la no repetición de los hechos, como a sí mismo no dejar en impunidad este delito de transcendencia internacional.